Esta causal sanciona las conductas del trabajador que comprometen gravemente la seguridad del establecimiento, la seguridad o actividad de los trabajadores, o su salud.
Evaluaremos si su conducta fue realmente «temeraria» o si se trató de un error o negligencia que no alcanza la gravedad exigida por la ley. Es fundamental analizar el contexto y si la empresa realmente demostró que su acción u omisión generó un peligro real para la seguridad.